El estudio de arquitectos Rudanko + Kankkunen ha ideado una escuela muy colorida con materiales locales y naturales; que ofrece un espacio para enseñar a los habitantes de la comunidad de Cambodia y además sirve como un medio de ingresos.
La escuela tiene dos pisos y un diseño que asegura la ventilación. La población local recibió entrenamiento y pudo ser construida totalmente a mano.
La mayoría del pueblo de Cambodia carece de infraestructura básica, un entorno seguro y un medio sostenible de ingresos. Cuando Hilla Rudanko y Kankkunen viajaron al país durante la primavera de 2010 como parte de una clase de la universidad, diseñaron esta escuela para ayudar al pueblo. Al principio, el concepto tan sólo era un proyecto de clase, pero al final se animaron a continuar con él e incluso recaudaron suficientes fondos para llevarlo a cabo.
La estructura está básicamente hecha a partir de ladrillos rojos que se colocaron con un patrón de agujeros en las paredes para obtener más luz del día, así como fomentar la ventilación natural a través del espacio.
Un gran porche cubierto en su interior ofrece la oportunidad de un salón comunitario, mientras que en el interior se llevan a cabo talleres.
La escuela profesional también sirve como un espacio de reunión pública para la toma de decisiones de la comunidad.
Hemos visto más escuelas aquí en Monkeyzen como futuristas y de arte culinario. Pero la más impactante es la Kindergarrten Kekec que os pasó mi compañera Alejandra Centeno. Dos escuelas, dos conceptos, dos países distintos.
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