El uso de plataformas de cloud computing se está expandiendo a muchas empresas y otro tipo de entidades, convencidas de las ventajas que su adopción les supone. En el sector industrial esta tecnología no está tan extendida, pero puede proporcionar importantes ventajas competitivas. La fábrica de Casbega, compañía embotelladora de Coca-Cola, está controlada en su totalidad por una nube privada.El complejo industrial de Casbega en Fuenlabrada (Madrid) es embotellador y proveedor de Coca-Cola para la zona centro de España. Al año salen del mismo 650 millones de litros de producto, diariamente la fábrica mueve unos 300 trailers y tiene capacidad para almacenar hasta 45.000 palés.
Estas enormes instalaciones están controladas por un servicio de cloud computing que utiliza servidores X5 de IBM. La infraestructura se implantó hace un año para crear una nube privada que controlara toda la maquinaria de la fábrica y organizara la producción.
De esta forma la fábrica puede ajustar con facilidad su producción. La estacionalidad del mercado, que en verano demanda más refrescos que en los meses de invierno, se puede afrontar con comodidad, pudiendo asimismo cambiar por completo, en un plazo de dos horas, las órdenes para producir en distintas proporciones los diferentes productos que salen del complejo.
El servicio de cloud computing que gobierna las instalaciones de Casbega lo proporciona Conversia IT, que a su vez utiliza la tecnología de IBM. Gracias a la plataforma creada se ha logrado estandarizar los sistemas de información y de ello se derivan ventajas en cuestiones de seguridad y de rendimiento.La recuperación de los procesos, en caso de incidencia, es más sencilla, ya que éstos se encuentran replicados. Sin embargo, no existen servidores ociosos, ya que la potencia de los mismos bascula según las necesidades de producción. Así es posible reducir de manera significativa los costes operativos. A un año vista desde la implantación Unai García, gerente de Conversia IT, sitúa la disminución en un 50 o un 60%. El director de la compañía, Javier Goyeneche, lo corrige con un “más, más”, hablando de “entre un 70% ó un 80%”.
Goyeneche señala que en el mundo industrial la tecnología de cloud computing no es tan frecuente. Este sistema le da la oportunidad a la fábrica de Casbega de controlar desde una capa de virtualización todas las máquinas automáticas y todos los procesos, ahorrando tiempo y costes gracias a la sincronización.
Automatización dirigida
El control que se ejerce sobre las máquinas automáticas de la fábrica se puede comprobar en el funcionamiento de unos los vehículos autopilotados que transportan palés de producto. En una parte de las instalaciones, con unas líneas pintadas en el suelo como guía, estos robots se mueven de un lado a otro con un orden perfectamente definido.
Están guiados por infrarrojos, medio con el que envían su posición al programa de ordenador que los controla. Para no chocar entre ellos o con las estanterías donde depositan la mercancía disponen de unos sensores que ralentizan su impulso y los hacen detenerse cuando es necesario. Existe una única persona, que se mueve en una especie de moto entre los vehículos y supervisa su actividad con ayuda de una tableta.
Estas máquinas reciben instrucciones del sistema central basado en la nube. Éstas son enviadas al sistema eléctrico de los robots y les indican cuál de ellos tiene que coger qué producto y llevarlo hasta qué lugar.
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