Este proyecto utiliza la última tecnología y tiene como característica reseñable una cubierta verde.
Ha sido concebida por el estudio australiano Lava.
Quiere romper con el estereotipo de aula donde el profesor ocupa una posición estática.
El concepto es flexible y se puede adaptar a diferentes usos y también tamaños.
El proyecto está pensado para poder ser fabricado en un lugar y después montado en su emplazamiento definitivo.
El techo verde incorpora paneles fotovoltaicos para generar energía verde y un sistema para recoger el agua de lluvia.
En climas cálidos el agua se utiliza para refrigerar el edificio mediante evaporación.
Sin duda una idea brillante de escuela, arquitectónicamente sostenible, para el futuro.
Via:
www.allpe.com
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